Se formaliza el traspaso de estudios para el desarrollo de una planta desaladora que beneficiará a más de 460.000 personas en la región.
La Dirección General de Concesiones y Aguas del Valle firmaron un contrato que permite avanzar en la licitación de una planta desaladora para la Región de Coquimbo, en cumplimiento del compromiso presidencial de enfrentar la crisis hídrica que afecta a la zona desde hace 14 años. El Director General de Concesiones, Juan Manuel Sánchez, destacó que “este contrato es un paso muy importante para abordar la situación de escasez hídrica, facilitando la licitación en plazos más acotados”.
La planta, que requerirá una inversión de 350 millones de dólares, tendrá una capacidad de 1.200 litros por segundo y está proyectada para beneficiar a 460.000 personas en la conurbación Coquimbo-La Serena. José Luis Murillo, Gerente General de Aguas del Valle, enfatizó que “el traspaso del estudio ambiental es un hito fundamental para la seguridad hídrica de miles de familias en la región”, subrayando la importancia de la colaboración público-privada en este tipo de iniciativas. Con la evaluación ambiental en marcha, se espera que la planta esté en funcionamiento para 2029.
