La investigación geotécnica, que incluye una campaña de sondajes, busca garantizar la seguridad de los habitantes frente a posibles riesgos geológicos en el casco urbano de la comuna.
En una reunión clave realizada en la municipalidad de Tierra Amarilla, se presentaron los avances del estudio para detectar cavidades y fracturas en el subsuelo de la comuna, iniciado tras el socavón ocurrido en 2022 en la mina Alcaparrosa. El proyecto, financiado por el Gobierno Regional de Atacama con un presupuesto superior a los 2.130 millones de pesos, tiene como objetivo evaluar la estabilidad del terreno y mitigar riesgos para los residentes. El gobernador Miguel Vargas destacó la relevancia del estudio para brindar “información fidedigna” que asegure la protección de la población.
La fase preliminar del estudio comenzó en junio de 2024 con trabajos geodésicos y geofísicos. En los próximos meses, se iniciará la campaña de sondajes, un paso clave para obtener un diagnóstico detallado del subsuelo. “Estas herramientas geofísicas avanzadas nos permitirán tomar decisiones informadas para reducir riesgos”, señaló Patricio Aguilera, director de Sernageomin. El proyecto, que se extenderá hasta finales de 2025, involucra a diversas autoridades locales y nacionales para garantizar la seguridad de Tierra Amarilla.