El precio del carbonato de litio sufrió un descenso por factores como el aumento de la oferta, la desaceleración de la demanda y tensiones comerciales, afectando las expectativas del mercado para 2025.
A principios de marzo de 2025, el precio del carbonato de litio se redujo a US$9.700 por tonelada (CIF Asia), lo que refleja una caída significativa en el valor de este mineral clave para la industria de vehículos eléctricos y almacenamiento de energía. Esta disminución se debe principalmente a un exceso de oferta en el mercado, ya que la producción de litio continúa incrementándose, con eventos como la reapertura de la operación de lepidolita de CATL en China. A su vez, las exportaciones de litio de Chile crecieron un 22,8% en enero, lo que también ha contribuido a una mayor disponibilidad del mineral en el mercado global.
Por otro lado, el Año Nuevo Lunar chino impactó la actividad comercial, reduciendo temporalmente la demanda, mientras que las proyecciones para 2025 sugieren que el mercado continuará en un superávit debido a una demanda más moderada y a un exceso de oferta. Según S&P Global, este superávit podría alcanzar las 100.000 toneladas de equivalente carbonato de litio (LCE), lo que dificulta una pronta recuperación en los precios. Las proyecciones de precios también fueron ajustadas a la baja, con una reducción estimada del 1,2% en 2025.
Adicionalmente, el mercado de vehículos eléctricos ha mostrado señales de desaceleración. Las ventas de autos eléctricos en los principales mercados cayeron un 39,8% en enero, lo que ha afectado las expectativas de demanda a corto plazo. Esta disminución se suma a las tensiones comerciales globales, donde la imposición de nuevos aranceles ha generado volatilidad en los precios de los metales, incluido el litio, afectando las expectativas de los inversionistas. Aunque los precios del litio continúan bajo presión, los analistas esperan un repunte gradual en el futuro debido a los esfuerzos globales por acelerar la electrificación.
A pesar de este contexto desafiante, las grandes empresas productoras de litio como SQM y Albemarle siguen apostando por el crecimiento a largo plazo. SQM, por ejemplo, reportó un aumento del 21% en las ventas de litio en 2024, impulsadas por la demanda de vehículos eléctricos, y espera un aumento del 15% en el volumen de ventas para 2025. Por su parte, Albemarle continúa con su estrategia de expansión y optimización de su red de producción, con proyectos piloto en Arkansas y Chile, mientras proyecta un crecimiento anual compuesto del 15% en la industria del litio entre 2022 y 2027.
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