Aumentar significativamente la recaudación cuando los precios, y por tanto los márgenes operacionales son elevados; generar una repartición balanceada de la renta minera entre el Estado, dueño de los recursos, y las empresas mineras que invierten su capital y asumen los riesgos del negocio; y mantener una posición competitiva como jurisdicción minera para la atracción de nuevas inversiones en el sector, son parte de los objetivos que busca Cesco con su propuesta de Royalty.
Fuente: Cesco.
Imagen. Pixabay.
En el contexto de la discusión que hoy se desarrolla en la Comisión de Minería y Energía del Senado sobre el proyecto de ley que impulsa un nuevo régimen tributario para el sector minero, el Centro de Estudios del Cobre y la Minería (CESCO) presentó su propuesta en la materia.
La iniciativa se complementa con la investigación llevada a cabo por el consultor Michel Jorratt, David Peters de Dictuc-UC, y el académico UC y miembro de Cesco, Gustavo Lagos.
Desde Cesco señalan que, con este esquema, la tasa de tributación efectiva asociada a este royalty será mayor a la tasa obtenida por el actual Impuesto Específico a la Minería (IEAM), incluso cuando existan márgenes operacionales reducidos (menores a 30%); y radicalmente superior al IEAM frente a condiciones del mercado favorables, pudiendo llegar a valores en torno al 50% del Margen Operacional Minero (MOM o renta operacional, definido como la diferencia entre las ventas mineras y los costos operacionales, sin incluir ingresos ni gastos financieros).
Asimismo, es importante remarcar que el esquema propuesto más que duplicaría (y en algunos casos prácticamente triplicaría) la recaudación asociada a los tributos específicos a la actividad minera, llegando a tasas tributarias efectivas nominales por sobre 45%, comparada con una tasa efectiva actual en torno al 40%.
Cargas tributarias mayores a esta propuesta, pueden poner en riesgo el desarrollo y expansión de la actividad minera y su correspondiente aporte al país.
Específicamente, la propuesta contempla:
Estructura mixta de royalty que considera un tributo ad valorem de 1% más una escala creciente respecto al margen operacional minero (MOM), similar al actual Impuesto Específico a la Minería (IEAM). Mantención de la actual invariabilidad tributaria ya pactada contractualmente con el Estado de Chile y por lo mismo, el nuevo régimen debe otorgar a las nuevas inversiones invariabilidad por vía legal, similar a la del artículo 11 ter. Del DL600.
Mantener la norma que exime de estos tributos a las operaciones de pequeña y mediana escala, en base al criterio ya establecidos en el actual IEAM, y debido a su contribución económica y social en las comunidades locales en las que éstas se insertan.
El royalty debería tener una diferenciación de montos según el tipo de producto que se venda por el concesionario, de manera de incentivar las etapas de fundición y refinación. Respecto del destino de parte de lo recaudado, se debe considerar el diseño de una estrategia nacional de ciencia, tecnología, conocimiento e innovación, implementando un plan respectivo, que debe considerar especialmente a las regiones en las cuales tiene lugar la actividad minera.