Desde niño Gabriel Hidalgo corrió y jugó en un pique minero viendo a su padre trabajar. Hoy continúa con el legado familiar, y es protagonista de una minería totalmente distinta.
Gabriel tiene 35 años, es ingeniero civil mecánico y tiene un máster en gestión de activo y mantenimiento. Lleva una década de experiencia trabajando en las grandes ligas de la minería. A Centinela llegó en julio del presente año, con el cargo de Ingeniero Confiabilidad Mantenimiento Camiones Mina, es decir, tiene a cargo la flota Komatsu, 930 y 980.
¿Cómo fue su experiencia de niño con la minería?
Fui criado en zona minera. Mi familia se ha dedicado siempre a la minería. Mi papá era pequeño minero. Lo vi con explosivos y las mechas; también trabajando con camionetas viejas y nosotros (sus hijos) le ayudábamos a arreglar los motores de los vehículos. De hecho, mi papá me llevaba a las minas cuando era pequeño. Imagínese un niño en una mina, eso hoy es impensado.
¡Hoy que continúa con la tradición pero todo es más grande!
Claro, actualmente puedo trabajar con la última tecnología, con los camiones más grandes de la minería, es decir, estoy satisfecho con mi profesión. Muy feliz.
¿Cómo ha sido el cambio, es distinta la minería de su niñez a la de ahora?
Los niveles de inversión y tecnología aumentan, la cantidad de personas que trabajan también, pero la esencia de la minería es la misma. El que trabaja por vocación lo puede entender. Nosotros estamos para extraer el metal del cerro y buscamos la mejor forma de hacerlo, de la manera más óptima, especialmente ahora con el tema de la consciencia medioambiental, y con el menor impacto posible.
¿La tecnología aquí es relevante para lograr los objetivos?
La tendencia va cambiando; por ejemplo, modelos de camiones que utilizaban mucha cantidad de aceite, hoy eso ya no ocurre, porque hay nueva tecnología para ese objetivo. La minería que trabajaba mi papá, incluso con la que yo empecé hace una década no se parece a lo de hoy. La sustentabilidad de los proyectos mineros dependerá de qué tan competitivo, respecto a la implementación de nuevas tecnologías, estén dispuestas las compañías a invertir y desarrollar. Creo que ahí está el futuro de la minería, porque las tecnologías están, solo hay que desarrollarlas e implementarlas.
¿Un ejemplo de lo que señala son los camiones autónomos que usted tiene a su cargo?
Claro y nuestra labor es que el equipo no falle. Esto es un gran salto y supone muchas ventajas, por ejemplo, en rendimientos de componentes en neumáticos, mayor eficiencia en los proceso de cargío, entre otras.
EL CAMINO DE LA MINERÍA COMO PROFESIÓN
Consultado Gabriel por el camino que podría realizar la persona que desea hacer de la minería su profesión, indica que “hay que sacarse la mugre un par de años; conocer las distintas realidades de la minería, trabajar en empresas contratistas; tener el conocimiento técnico, y posteriormente dar el salto a otros desafíos como puede ser la gestión que se realiza en las distintas áreas”.
PUNTA DE CHOROS Y DOMINGA
Respecto de los desafíos medioambientales en la minería, Gabriel dice que le toca directamente porque “con mis papás tenemos una parcela en Punta de Choro. Ellos viven en la zona y como se sabe ahí está la problemática del medioambiente y la minera Dominga. Eso es un tema muy álgido y un claro ejemplo, al igual que Pascua Lama, que no se aceptaron los requerimientos medioambientales y el proyecto no surgió. La minería tiene que mirar para allá (al medioambiente), y nosotros, como profesionales, tenemos que estar preparados para ese desafío”.